Como la práctica hace al maestro, he aquí Gasparin practicando en el living de nuestra casa, sobre la alfombra, el gran arte de caminar. Siempre con la "guía" del Camilo (que en verdad es un guía con un método no tradicional).
jueves, 28 de enero de 2010
martes, 26 de enero de 2010
Primeros pasos
Los primeros pasos. Esto ocurrió el día viernes 22 de Enero del 2010. Al año con dos meses y tres semanas.
¡Que productivo ha sido este año para Gaspar!
¡Que productivo ha sido este año para Gaspar!
domingo, 10 de enero de 2010
Aprendizajes de comienzos de año
Esto que pasó acá hace unos días, que le decían el año nuevo parece que es verdad, porque parece que yo soy alguien nuevo. Porque hace unos días que estoy super super capo. Puedo hacer muchas cosas difíciles.
Lo que más me aplaudió mi mamá y mi hermano Camilo es cuando me paré solito. A mi me encantó hacerlo. Uno se pone con los dos pies en el suelo, y como acunclillado. Y después, sin tocar el suelo con las manos, uno estira las rodillas, y zas! queda parado. Y una vez que uno quedó parado, simplemente pones el poto un poco para atrás y te tiras. Y así caes sentado en el suelo y puedes empezar a hacer todo de nuevo. Uno de estos días estuve haciendo eso muuuchas veces, y cada vez que lo hacía mi mamá y el Camilo me aplaudían mucho. Me encantó porque los hice reir muchísimo.
Lo otro que aprendí esta semana es a subirme a las sillas. Pero por alguna razón eso no hace que mi mamá aplauda, todo lo contrario, cuando me ve, me empieza a decir: "No, Gaspar!", "Cuidado!" "Bájate de ahi". Pero, ¡a mi me encanta subirme arriba de todo! Me puedo subir a las sillas del comedor. Y lo más difícil, pero que también sé hacer, es a subirme a la silla del escritorio... la que tiene rueditas. Cuando hago eso, ahí sí que mi mamá empieza altiro a retarme. Yo ni siquiera alcanzo a explicarle para qué me subí. Pero no importa. Esa silla es maravillosa. Es blandita, y se mueve. Además cuando me subo ahí, alcanzo a ver el computador y puedo apretar las teclas. ¡Con razón mi mamá también le gusta mucho sentarse en esa silla!
Y hoy día en la mañana, cuando todavía mi papá estaba durmiendo, yo entré al escritorio, ¡y pude prender el computador yo solito! Es super fácil, no sé porque mis papás siempre me dicen que no toque nada del computador. Lo único que hay que hacer es apretar un boton que hace que se prendan unas luces y el computador empieza como a sonar suavecito. Estoy muy contento de haber aprendido a hacer esto, porque ahora voy a poder escribir más seguido en el blog, y no tendré que esperar que mi mamá o mi papá prendan el computador.
Asi es que año nuevo, niño nuevo.
¡Me encantó!
Lo que más me aplaudió mi mamá y mi hermano Camilo es cuando me paré solito. A mi me encantó hacerlo. Uno se pone con los dos pies en el suelo, y como acunclillado. Y después, sin tocar el suelo con las manos, uno estira las rodillas, y zas! queda parado. Y una vez que uno quedó parado, simplemente pones el poto un poco para atrás y te tiras. Y así caes sentado en el suelo y puedes empezar a hacer todo de nuevo. Uno de estos días estuve haciendo eso muuuchas veces, y cada vez que lo hacía mi mamá y el Camilo me aplaudían mucho. Me encantó porque los hice reir muchísimo.
Lo otro que aprendí esta semana es a subirme a las sillas. Pero por alguna razón eso no hace que mi mamá aplauda, todo lo contrario, cuando me ve, me empieza a decir: "No, Gaspar!", "Cuidado!" "Bájate de ahi". Pero, ¡a mi me encanta subirme arriba de todo! Me puedo subir a las sillas del comedor. Y lo más difícil, pero que también sé hacer, es a subirme a la silla del escritorio... la que tiene rueditas. Cuando hago eso, ahí sí que mi mamá empieza altiro a retarme. Yo ni siquiera alcanzo a explicarle para qué me subí. Pero no importa. Esa silla es maravillosa. Es blandita, y se mueve. Además cuando me subo ahí, alcanzo a ver el computador y puedo apretar las teclas. ¡Con razón mi mamá también le gusta mucho sentarse en esa silla!
Y hoy día en la mañana, cuando todavía mi papá estaba durmiendo, yo entré al escritorio, ¡y pude prender el computador yo solito! Es super fácil, no sé porque mis papás siempre me dicen que no toque nada del computador. Lo único que hay que hacer es apretar un boton que hace que se prendan unas luces y el computador empieza como a sonar suavecito. Estoy muy contento de haber aprendido a hacer esto, porque ahora voy a poder escribir más seguido en el blog, y no tendré que esperar que mi mamá o mi papá prendan el computador.
Asi es que año nuevo, niño nuevo.
¡Me encantó!
domingo, 3 de enero de 2010
Jugando al dónde está
Este video es solo para familiares o gente muy enamorada del Gaspi. Es de esas cosas con las que solo pueden gozar padres y abuelos. Pero por si aca, acá va.
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